Le mandé a la mierda, directamente.
Segunda edición de las Summer Editions. Hoy mezclamos el sector inmobiliario y el respeto.
Qué calor hacía aquel verano. Como ahora, pero estábamos sin aire en la oficina.
El protagonista de hoy se llama Luigi, parece un puto chiste pero lo vi en su NIE. El tío era pizzero en Alemania, por lo que nos contaba y nos enseñaba de sus rrss era muy conocido en su ciudad.
Parece que a los alemanes les encanta la pizza.
Cada 2 años el amigo Luigi y su mujer venían a Ibiza a comprar un piso para alquilar. Ellos sufrieron el aumento agresivo de precios, pero también se vieron beneficiados.
Su primera compra fue de 95.000€.
Su segunda de 110.000€.
Su tercera fue ya de 155.000€
Y cuando yo le conocí, la compra fue de 185.000€.
Reconocer a Luigi era muy sencillo.
160cm, casi calvo, su camiseta de rayas rojas y blancas a lo Wally y un problema debido a un accidente que le hacía tener la mano sin funcionalidad.
Lo de la mano dirás que es una tontería, pero aún así nos enseñó videos usándola para amasar pizza y te dabas cuenta de que tú solo tenías excusas cuando decías que no podías hacer algo.
Pero escondía algo.
Ese año, el de la compra de los 185.000€, algo pasó que cambió todo.
El proceso fue igual que siempre. Llegaba a la isla, nos visitaba, le enseñábamos todo lo que teníamos y se decidía por uno.
En contra de nuestro consejo, se decidió por uno 10.000€ más barato que otro, pero con okupas. Okupas de 15cm de color negro que anidaban por toda la casa.
Cucarachas.
Esta edición está patrocinada por:
La inversión inmobiliaria es una forma genial de ganar dinero, pero no es la única.
Hay gente que se dedica a ello al 100%, pero otros seguro que queréis más fuentes de ingresos.
Conozco a alguien que se dedica precisamente a eso, a conseguir tantas fuentes de ingresos como puede, sobretodo online. Le gusta trabajar desde casa, y si puede ganar dinero sin trabajar mucho, mejor.
Igual le conoces, pero si no le conoces te aconsejo conocerlo, se llama Marc Frau.
Tiene una newsletter semanal en la que habla de sus aventuras, de cómo gana dinero y de cuánto gana, y de lo que le funciona y lo que no. Y lleva desde 2015 dedicándose a ello, osea que tiene historias para rato.
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Fallo nuestro el no ponerlo por escrito cuando firmó la reserva.
Tras varios intentos de desinfectar la vivienda, vino a vernos muy enfadado.
En aquel entonces yo aún no estaba en el despacho y me sentaba al lado de la que hoy en día sigo considerando mi jefa. Era aún un polluelo, pero empezaba a enterarme de que iban las cosas.
La conversación transcurrió como te la imaginas, reproches por aquí explicaciones por allá.
Hasta que se pasó de la raya.
Empezó a dar voces hasta que le faltó el respeto a la jefa y a otra compañera. Y me levanté para decirle que se fuese.
El señor Luigi se me encaró, pero después de darnos varias voces y explicaciones en otros idiomas varios, se marchó y jamás volvió.
Yo todavía era un pringao (lo sigo siendo) con menos conocimiento que tú de fiesta un sábado, pero a tu gente nadie debe faltarle al respeto nunca.
Y así fue la primera vez que tuve que enfrentarme a un cliente. Estés donde estés jamás dejes que te falten al respeto.
Y si tienes un pequeño negocio y se lo faltan a tu gente, no dudes en actuar.
Hay gente que dice que el cliente es lo primero, pero para mi siempre ha sido y será tu gente, tus trabajadores.
PD: lo del subtítulo es un mote que se puso él mismo, no hates.
PD1: en Youtubepelo no sale Luigi, pero salgo yo contando cosas. (Cómo empezar en el sector inmobiliario)
PD2: el experimento del bot va, botlando.